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Creador de 'Baby Vamp' rompe el silencio a 23 años del polémico desnudo: “Se me fue de las manos"

Escrito por:   Marina Peñaloza

Creador de 'Baby Vamp' rompe el silencio a 23 años del polémico desnudo: “Se me fue de las manos"

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En 2012, Lucía Flores, una joven de 17 años, protagonizó la polémica intervención artística 'Baby Vamp' al caminar desnuda por el centro de Santiago, Chile, generando debate sobre arte y provocación. El argentino Luizo Vega ideó la controvertida performance, que evolucionó a un experimento social tras ser cuestionado en TV. Años después, Lucía lleva una vida tranquila en Argentina y Vega se disculpa por cualquier ofensa causada, reflexionando sobre los límites artísticos y la importancia de transmitir ideas sin incomodar.

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En 2012, una joven de 17 años caminó desnuda por el centro de Santiago, dejando atónitos a transeúntes y medios. ¿El motivo? Una provocadora intervención artística bajo el nombre de ‘Baby Vamp’, ideada por el argentino Luizo Vega.

Aunque pocos recuerdan el nombre real de la protagonista, Lucía Flores, su imagen recorrió el país generando un debate encendido sobre arte, censura y provocación.

Con los años, ese episodio dejó de ser solo una performance.

Según explicó Vega, el punto de quiebre fue cuando el entonces alcalde Pedro Sabat lo increpó en vivo en televisión. “Ahí el proyecto deja de ser pop art y se transforma en una acción social”, sostuvo.

"Fue una revolución cultural, porque lo fue”.

'Baby Vamp': el experimento social al desnudo

Actualmente, Lucía lleva una vida tranquila en Argentina, alejada del foco público. Se dedica a hacer talleres de yoga y participa en actividades relacionadas con el arte contemporáneo.

En tanto, Vega vive en Francia, desde donde se mantiene activo en el mundo creativo.

Pero su día a día también incluye una labor muy distinta: “Estoy en mi reserva ecológica, donde cuido a más de 110 animales rescatados”, relató en una conversación exclusiva con el equipo de Plan Perfecto.

A 23 años del suceso, el artista hizo un potente mea culpa: “No volvería a hacer un proyecto así”, confesó.

“Entendí que uno puede transmitir ideas sin cruzar ciertos límites. Baby Vamp terminó siendo una imagen impuesta, algo que obligaba a mirar. Y eso puede ser violento”.

"Ahí sí yo entiendo que se me fue de las manos el proyecto".

Y aunque el objetivo nunca fue incomodar, hoy lanza un mensaje claro: Si alguien se sintió ofendido, les pido disculpas. No era mi intención molestar a nadie. Solo quería expresarme”.

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